CULTURA

Recogen firmas bajo la consigna “Ni un paso atrás en la cultura”

05.09.2014

MONTEVIDEO (Uypress) — Un movimiento, cuyo nacimiento se produjo por diversos ciudadanos vinculadas a las más diferentes manifestaciones de la cultura, lanzo un llamado que repasa la situación de la cultura previo al gobierno del Frente Amplio y la realizaciones de los últimos 9 años.

El manifiesto afirma que sin la cultura Uruguay "sería un país semicolonial" y recuerda que en 2005 "debió enfrentarse a un país sumido en una crisis profunda".

A continuación se puede leer el Manifiesto por la cultura y al final del mismo un lugar para quienes lo deseen puedan adherirse a esta manifestación.

Entre las primeras firmas se encuentra personalidades muy conocidas como Tomás de Mattos, Washington Benavides, Ruben Rada, Eduardo Galeano, Belela Herrera, Daniel Vidart, Mario Delgado Aparaín, José Luis (Pepe) Guerra, Walter Tournier, Osvaldo Laport, Jorge Denevi,  t Mario Carrero.

Manifiesto x la cultura

La cultura es un ingrediente central de la identidad nacional. El desarrollo de la propia cultura es tan imprescindible como la capacidad de apertura a lo que se produce fuera de nuestro territorio. Sin ella seríamos un país semicolonial, obligado a repetir acríticamente lo que se genera en los centros del llamado primer mundo.

Cuando el Frente Amplio asumió su primer gobierno en el año 2005, debió enfrentarse a un país sumido en una crisis profunda. Parte de aquella crisis mostraba también un deterioro generalizado de la relación del Estado con los sectores vinculados a las artes, y una gravísima decrepitud del patrimonio histórico cultural, soporte y albergue de las expresiones artísticas nacionales.

Desde esa fecha la cultura uruguaya ha recibido apoyos como nunca antes, tanto en estímulos a la creación como en medidas tendientes a la democratización del acceso a la cultura.

Además del logro fundamental de una Ley de Seguridad Social para los artistas, en estos diez años se implementaron diversos Fondos para promover la actividad cultural, entre los que se cuentan los de Incentivo, los Concursables y el sistema de becas -en Letras, Artes Escénicas, Artes Visuales, Audiovisual, Danza y Música- del Fondo de Estímulo a la Formación y Creación Artística (FEFCA), entre otros.

Esta clase de fondos ha permitido una verdadera transformación en la diversidad de la oferta cultural, con una incidencia especial en el caso del cine, para cuyo estímulo se creó en 2008 el Instituto del Cine y Audiovisual del Uruguay, administrador del Fondo de Fomento Cinematográfico que -junto a los dos Fondos de la Intendencia de Montevideo (FONA y Socio Audiovisual)- ha dado un impulso inédito al cine nacional.

Sumemos a ello las medidas para descentralizar el acceso a la cultura: los 124 Centros MEC a lo largo y ancho del territorio, los Fondos de Desarrollo de Infraestructuras Culturales para el Interior, que financian proyectos de adecuación edilicia y equipamiento de espacios culturales públicos y privados. El programa de Integración socio-cultural dirigido a poblaciones en situación de vulnerabilidad social (adultos mayores, adolescentes en situación de riesgo, población privada de libertad etc.), y las Usinas y las Fábricas de Cultura, promoviendo el potencial creativo de los uruguayos sin distingos.

Agreguemos las siguientes creaciones: Museo Figari, Espacio de Arte Contemporáneo, Instituto de Artes Escénicas del Uruguay, Centro Nacional de Documentación Musical Lauro Ayestarán, Sistema Nacional de Museos, Festival Internacional de Artes Escénicas, Departamento de Industrias Creativas, Premio Nacional de Música, encuentros de Arte y Juventud, así como la recuperación y reformulación del Gran Premio a la Labor Intelectual y el Premio de Artes Visuales.

A esto hay que sumar la renovación de la Biblioteca Nacional, la culminación del Auditorio del SODRE  -obra demorada durante décadas- que hoy es orgullo nacional por sus contenidos y programación, además del notable impulso dado al cuerpo de baile y la Orquesta Juvenil del organismo. También es necesario recordar que en la actualidad Uruguay participa en las principales ferias del libro del mundo. Y remarcar que mucho de lo realizado ha sido posible gracias al incremento del presupuesto de la Dirección Nacional de Cultura, que pasó de 10 mil dólares en 2005 a 10 millones de dólares en 2014.

Sabemos que queda mucho por hacer, pero estamos convencidos de que se ha dado una nueva valoración al quehacer cultural y que se va en la dirección correcta.

No ha sido menor el esfuerzo hecho en materia de Ciencia y Tecnología, un área del conocimiento cuyo desarrollo es imprescindible para lograr una verdadera autonomía. En 2005 se creó el Gabinete Ministerial de la Innovación en Ciencia y Tecnología que funciona en el ámbito de Presidencia de la República, y en 2006 la Agencia Nacional de Investigación en Innovación (ANII) que ha puesto a disposición de los uruguayos una serie de instrumentos para promover la investigación y la aplicación de nuevos conocimientos a la realidad productiva del país, desde fondos para proyectos de investigación y becas de posgrado nacionales e internacionales, a programas de incentivo a la cultura innovadora tanto en el sector privado como en el público.

Desde el primer gobierno del Frente Amplio han sido muchos los logros en materia económica y social que han permitido una drástica disminución de la pobreza y una mejor distribución del ingreso, que habrá que seguir mejorando en los años venideros. Parte de la política de derechos desplegada paralelamente incluye el de acceso a la cultura, un derecho fundamental para la dignidad de las personas y la construcción de ciudadanía.

Es responsabilidad de todos que estos cambios se consoliden y acrecienten, haciendo posible el gran salto cualitativo que los uruguayos nos merecemos. Para que los apoyos a la cultura- tan importantes como las políticas sociales llevadas a cabo- se amplíen y profundicen, los abajo firmantes votamos al Frente Amplio.

Firmo por la cultura: para sumarse es AQUÍ